Percival Harrison Fawcett, nacido en Inglaterra en 1867 fue un coronel británico y posterior explorador. Estudió antiguas leyendas y archivos históricos con el convencimiento de que existía una ciudad perdida en el estado brasileño de Mato Grosso.
Para esta afirmación se basaba en un manuscrito portugués del siglo XVIII, conocido como el Manuscrito 512. Este manuscrito corresponde a una narración hecha por un grupo de expedicionarios portugueses que, según el propio manuscrito, descubrieron las ruinas de una ciudad perdida completamente desconocida, con muestras de una civilización altamente desarrollada del tipo grecorromano. En dicho manuscrito también se menciona el hallazgo de yacimientos de oro y plata.
Para Fawcett, la ciudad perdida era una de las diferentes ciudades perdidas que había en Brasil, descendientes de una vieja civilización, la Atlántida, cuyo pueblo aún conservaba vestigios del pasado.
En 1925 inicio su última expedición en busca de esa ciudad perdida. La última señal de Fawcett databa del 29 de mayo de 1925, cuando telegrafió a su esposa diciendo que estaba listo para penetrar el territorio inexplorado, acompañado únicamente de su hijo Jack y un amigo de éste Raleigh Rimmell. Relató que estaban cruzando el Alto Xingú, un afluente de sudeste del Río Amazonas. Desde entonces nada más se escuchó de ellos.